Ay, El Amor… Es cosa tan rara el amor, pero nos encanta estar ahí, en pareja, sentir esas mariposas en el estómago al ver a nuestro ser amado, pero cuando está lejos, muyyyy lejos, ¿el amor sigue igual? ¿Qué tanto estamos dispuestos a esperar? ¿La lealtad, fidelidad y comunicación es nuestro fuerte?
Por estás interrogantes y más comadrita, vamos a ver los pros y los contras de tener una relación a distancia. ¡Tomen nota!
Cosas buenas:
1.- Independencia en la relación, estar fisicamente separados nos ayuda a retomar la individualidad perdida en la pareja, no es olvidar al otro, más bien es aprender a disfrutar aspectos importantes de nuestra vida. La satisfacción por separado hace una relación más sana.
2.- ¡Podemos seguir en contacto! La tecnología nos ayuda a compartir nuevos momentos con nuestra pareja, conocer nuevos lugares, lejos pero cerca.
3.- La pasión crece, echarnos de menos puede hacer que el enamoramiento se alargue y es obvio las ganas de tener contacto físico con nuestra pareja aumenta la sensación del cercano encuentro, a vaaaa.
4.- La comunicación, fidelidad y lealtad se ponen a prueba. En caso de superar el periodo de tiempo lejos, estar enamorados y la relación se refuerzan: nos volvemos más pacientes, tolerantes, valoramos el tiempo juntos, nos damos cuenta que realmente queremos seguir caminando de la mano con nuestra pareja.
Cosas malas:
1.- Podemos crear en nosotros soledad y frustración al echar de menos a la persona que esta lejos, en ocasiones nos darán ganas de tirar la toalla.
2.- Discusiones, uff, si cerca se daban, cuando andamos muy alejados son más fuertes. La distancia siempre será un tema acompañado de reproches.
3.- El tiempo no ayuda mucho pues la incompatibilidad de horarios pueden hacernos sentir duda de lo que la otra persona este haciendo, con quién y que no somos tomados en cuenta, tal vez lleguemos a sentir que ya no somos importantes o nos dejaron de querer.
4.- Los celos y la desconfianza hacen su aparición, ¡noooo! Pues si raza, sin duda llegamos a imaginar situaciones alejadas de la realidad que nos hacen sentir mal y crean discusiones innecesarias.
5.- El entorno nos puede jugar una mala racha, pues al no tener a nuestra pareja cerca nos apoyamos en otras personas que están a nuestro alrededor. Muchos nos dirán que eso de las relaciones de lejos no funciona y que no deberíamos estar sufriendo por alguien a quien tal vez ya no le importemos, al final puede pasar que nos dejemos influenciar por esa negatividad.
Estos pros y contras dependerán en cada caso, pero son algunos de los principales factores que pueden surgir en un amor a distancia. Debemos recordar que para mantener cualquier relación lejos o cerca debemos tener paz con nosotros en primer momento, y mutuamente la confianza, la neta y la lealtad deben ser la bandera, solo seamos honestos de a quién queremos de compañera o compañero en nuestra vida.