El desapego es lo contrario a la dependencia, establecer límites para sí mismo y con los demás mantienen relaciones sanas, sin manipulación, ni expectativas.
Practicar el desapego no significa romper vínculos con todo aquello que es importante, sino más bien significa que se puede prescindir de ello y continuar nuestra propia historia.
Comadritas, compadritos, en las relaciones personales el desapego es la clave para nuestro bienestar, podemos relacionarnos con otras personas de una manera más libre dejando espacio para la individualidad.
Disfrutar compartir tu tiempo con alguien más, pero sin miedos a perder a esa persona.
El amor deja de ser necesidad para convertirse simplemente en un sentimiento que nace, crece y no se sufre.
El poder del desapego se centra en simplemente no aferrarse u obsesionarse con algo como si fuera lo único importante de la vida, los excesos son como cadenas y privan de la libertad.
Tomar la decisión de ser libre no quiere decir que se dejen de lado los sueños, las metas, los deseos, sino más bien no tener expectativas hacia los demás.
La paz y la fuerza interior se refleja en una persona que maneja el desapego, ya que esa persona esta consiente de que las cosas pasan y no se pueden cambiar o controlar.
El apego nos impide avanzar, vivir cambios, no podemos aferrarnos al pasado, ni a las cosas, ni a las personas, porque estaremos anclados al dolor, a las perdidas y al sufrimiento.
Vivir y ocuparse solo del presente es mucho más fácil que vivir pensando en aquel pasado que ya no podemos arreglar o cambiar y el futuro es incontrolable e incierto.
Solo podemos disfrutar de lo que hacemos aquí y ahora, cuando nuestro cuerpo y nuestra mente están alineados.
Raza, todo está en constante cambio y debemos aprender a aceptar y dejar de intentar cambiar y controlar todo, muchas veces las cosas son como son por su orden natural y debemos dejar que fluyan, que ocurran sin pretender intervenir en su cauce.
Cultiva tu propia felicidad, siéntete responsable, maduro, toma conciencia de tus decisiones y asume las consecuencias de tus actos. Elige por ti mismo y no dejes tu salud mental y bienestar en manos de otros.
¡Si vivo en el presente y lo aceptó, sin juzgarlo, etiquetarlo, lograré vivir en paz!
Familia, el desapego es aprender a amar de una manera más sana y equilibrada, respetando cada una de las emociones y sentimientos de las demás hacia nosotros.
Mente, cuerpo y alma en armonía, siempre darán un bienestar a su vida!!!